Uno de los impulsos primitivos de la humanidad es la expresión. Éste se convirtió en una necesidad primordial para el desarrollo de la especie que desde sus inicios y antes del lenguaje estructurado manifestó el afán de expresarse.
Huellas de esta pulsión se explicitan en las primeras pinturas rupestres, con las que confirmamos que el hombre antes de transformar sus pensamientos y emociones en palabras, decidió usar las líneas, manchas, figuras y representaciones como su herramienta, su camino para ser, para estar.
La especie humana es compleja y si la analizamos desde cualquier punto de vista, podemos identificar como dicha complejidad nos ha llevado por caminos insospechados. Las habilidades que hemos desarrollado debido a las dificultades que nos han azotado como especie, han forjado una capacidad inmensa de resiliencia y unas aptitudes insuperables de adaptación.
Por poner un ejemplo, el superar nuestras limitaciones o satisfacer la curiosidad nos ha llevado a crear una infinidad de soluciones y herramientas que abren posibilidades infinitas y, a pesar de todos estos avances, se nos ha olvidado que seguimos siendo seres primitivos, que aún nos guiamos por instintos básicos.
Es por esto que George Wolf, un artista radicado en Colombia, decidió dedicar su vida a comunicar por medio del arte, utilizando la ilustración y la fotografía como sus principales herramientas, para encontrar lugares narrativos que lleven al espectador por caminos fantásticos y oníricos en los que al final se encuentra una fuerte dosis de realidad.
A lo largo de su vida ha estado en contacto con diversas ramas del arte con las que ha complementado su narrativa, llevando cada vez más lejos los mensajes detrás de sus imágenes, tocando temas profundos e íntimos que sin importar donde quiera que vean su obra, los espectadores tengan conexiones con ella.
Resiliencia, inclusión, impotencia, tradición, soledad son algunos de los temas que van de la mano con los mensajes llevados a un plano visual por George.
La mayoría de su trabajo está enfocado en trabajar con poblaciones o modelos que estén directamente relacionados con la temática de dicho proyecto. De acuerdo con este foco, ha llegado a trabajar con pacientes psiquiátricos, población en condición de discapacidad o en estado de desplazamiento forzado, entre otros. En ocasiones, incluso, el autorretrato ha sido el camino para llevar a cabo algún proyecto específico.
“Las imágenes son las ventanas que nos muestran lo invisible” es la premisa con la que George construye el discurso que acompaña su trabajo. Llevando siempre al plano fantástico una temática más profunda.
Chía, Cundinamarca.
República de Colombia
Julio de 2023